LA VIRTUD MÁS SOBRESALIENTE DE CORREA.

Por: Remo Cornejo Luque | rcornejoluque@hotmail.com

Pasando revista a los últimos presidentes del Ecuador, concretamente desde el retorno de la democracia representativa burguesa, descubro y aseguro que sólo Rafael Correa sobresale frente a sus predecesores, manteniendo una “virtud inequívoca”, que sólo él, con aires de sobra, puede hacerla tan evidente.

Y es que no puede ser de otra manera, pues su propia naturaleza de clase, su origen pequeño burgués, su entorno social con grupos de la burguesía desarrollista y de empresas transnacionales, y su círculo de adulones que le hacen creer que es el “Mesías”, todos originarios de la rancia partidocracia, abonan a configurar una conducta social cada vez más clara en contraposición de las demandas insatisfechas de los sectores sociales organizados que lo llevaron a Carondelet.

Sólo Rafael Correa, ha sido capaz, en tan corto tiempo, desde la posesión de su segundo mandato, -a propósito de “radicalizar su revolución ciudadana”-, de enfrentar a los pueblos del Ecuador, de injuriarlos y pretender aniquilar sus organizaciones naturales. Sólo él, presumiendo de superdotado, quiere “cambiar” el país a su manera de pensar y sin escuchar razones.

Se propuso acabar con la UNE, so pretexto de buscar calidad en la educación y eliminar a los “interlocutores de los maestros”, y lo que consiguió fue cohesionar a todos sus agremiados, independientemente de su posición ideológica, para hacerle frente con un vigoroso Paro nacional indefinido en defensa de la dignidad del magisterio y por un verdadero cambio en la educación donde la evaluación no tenga carácter punitivo, acción que terminó en victoria.

Se propuso minimizar y vilipendiar la voz del movimiento indígena, representado por la CONAIE, y tuvo como respuesta la unidad de sus organizaciones y un poderoso levantamiento con cierre de carreteras, en defensa del agua y en contra de la nefasta ley minera, que terminó también con victoria.

Se ha propuesto imponer una Ley de Educación Superior, regentada por la SENPLADES, despotricando no solo contra las universidades públicas y escuelas politécnicas sino también contra las particulares y católicas donde él estudió y lo que ha logrado es unificar y enardecer a todos los estamentos de los centros de estudios superiores, como nunca antes visto en los 31 años de retorno constitucional, que vienen demandando una revisión integral del proyecto gubernamental y demostrando en las calles la fortaleza de la comunidad universitaria.

Así mismo, se ha propuesto acabar con el derecho a la sindicalización y lo que ha alcanzado es la unión de todas las centrales sindicales por la derogatoria del Decreto 1701 y el anuncio de más movilizaciones.

Es decir, el presidente Rafael Correa ha hecho y está haciendo lo que ningún otro mandatario pudo hacer y es unir a las diversas corrientes de pensamiento ideológico y político, de cada sector social, en contra de su propia política. Estas corrientes de pensamiento se unen para defender sus justas aspiraciones y derechos institucionales, gremiales y sectoriales, contempladas en la nueva Constitución. Están dispuestas a no seguir soportando tanta ofensa e ignominia y por ello se movilizan por el verdadero cambio. Esta “virtud del presidente” no la tiene cualquiera..