La lucha estudiantil no es criminal

Por Carlos Bacacela A.

En el espacio “Cartas al Editor” del Diario el Telegrafo del día jueves 10 de septiembre, he leído un comentario hecho por Ángel Largo Méndez. En su escrito relata lo “hilarante” que le resultó mirar a Marcelo Rivera, presidente nacional de la FEUE, “saltando como niño malcriado sobre un carro”, en la cadena habitual del gobierno de los días martes, y que además el Sr. Rivera sería un claro ejemplo del detrimento de la enseñanza universitaria; que dicha organización estudiantil ha perdido su legitimidad como vocera de los estudiantes universitarios, que se pretende ser los representantes del movimiento estudiantil y que viven enquistados en los centros de educación superior creando maquinarias de lucro personal. Ciertamente que estas palabras hacen consonancia con el discurso tergiversado y mal intencionado del gobierno nacional al criminalizar la lucha, esto no es la primera vez que ocurre pues también se hizo lo mismo con los indígenas y campesinos que se oponen a la explotación minera a gran escala, la cual quiere ser impuesta a rajatabla por el presidente de la república.

Me parece que estas palabras más que ser hechas con la cabeza parecen ser hechas con el hígado, pues la falta de análisis del problema educativo en su conjunto, son visibles. Es real que la educación superior universitaria tiene que cambiar, tiene que convertirse en un instrumento que apoye al desarrollo de las naciones en pro de alcanzar el tan anhelado objetivo de eliminar la pobreza y la injusticia. Es precisamente el romper con un sistema educativo no identificado con las necesidades del país, lo que ha impulsado a la FEUE y los jóvenes que pasamos por las aulas universitarias, a combatir con toda firmeza. Como estudiante y dirigente universitario que fui, participamos en las jornadas de lucha por el presupuesto, levantamos toda una movilización a nivel nacional con nuestra propuesta de reforma universitaria, que nació de la discusión y el debate con nuestros compañeros de aula; propuesta que se viene discutiendo por varios años y que hoy la Senplades no la quiere incluir en su proyecto de ley.

Nosotros nunca pretendimos ser los representantes de la juventud, esa responsabilidad nos la ganamos en el quehacer diario de proponer las alternativas para construir un país diferente. Las conquistas que están plasmadas en la nueva constitución, como la gratuidad de la educación, son patrimonio de nuestros pueblos, esta nos costó la sangre y la vida de muchos de nuestros compañeros que como Milton Reyes o Damián Peña la dieron generosamente, así que no me venga a decir que el gobierno nacional por decreto dio paso a la gratuidad.

La FEUE se ha legitimado por más de 60 años pues no ha claudicado jamás con los ideales de libertad del pueblo ecuatoriano, las exigencias que hoy se hacen a Rafael Correa tienen su justeza, pues se está relegando a segundo plano las propuestas de un sector social que ha marcado la pauta en la lucha social y política del país.

Por otro lado le exijo al Sr. Largo que demuestre con pruebas y documentos sus aseveraciones hechas en su carta sobre las “maquinarias de lucro” que según él, hemos creado las personas que fuimos y son dirigentes universitarios.

Por último, a nombre de los miles de jóvenes que creemos en una verdadera revolución social (roja, no verde), me solidarizo con Marcelo, pues la lucha estudiantil que él como presidente nacional de la FEUE encabeza, es una clara demostración de consecuencia con los verdaderos intereses de la juventud universitaria y del país.